20 may 2012



   Se me han acabado las ganas de vivir... No es que tuviese muchas, la verdad, siempre he ido escasa de motivaciones e ilusiones... Pero es que ya no me queda nada... lo he perdido todo... 
   No quiero soñar, porque solo consigo incrementar el dolor y la desesperación... Nací para soñar, pero estoy condenada a que mis sueños sean irrealizables...
   No quiero pensar, porque piense lo que piense siempre acabo igual... pensando en ti...
   Sé que puedo, que soy lo suficientemente fuerte como para seguir viviendo en este infierno de forma indefinida, que puedo aguantar este vacío y esta agonía durante mucho tiempo... pero tengo miedo... porque poder no es querer...
   Vale, admito que el alcohol lo hace más llevadero... pero cuánto tardarán en darse cuenta en mi casa??? no es todos los días, como antes... Pero, en los momentos en que mi cordura pende de un hilo, en los momentos en los que el dolor de no saber nada de ti es superior a cualquier dolor físico... en esos momentos tengo miedo... no de hacerme daño, eso ya me da igual, sino de hacerte daño a ti, de hacerte creer que eres tu el culpable, cuando en realidad soy yo, solo yo...


1 comentario:

  1. Oh,que tríste y boníto,me encanta,pero me hace sentír igual de mal,es horríble esperar a la persona que amas.Un beso desde tu cielo,el mío,el nuestro

    ResponderEliminar

cuéntame...